La seguridad de nuestro hogar es una preocupación constante, y uno de los aspectos más importantes para garantizarla es la elección adecuada de cerraduras.
En este artículo, describiremos las partes comunes de una cerradura y exploraremos opciones adicionales para reforzar la seguridad de nuestras puertas. Además, abordaremos la importancia de seleccionar un buen bombillo, considerando los principales métodos de robo.
Bombín
El bombín es el corazón de cualquier cerradura. Es el componente que permite el giro de la llave y, por ende, la apertura o cierre de la puerta. ¿Por qué es importante escoger un buen bombillo? La resistencia del bombín a técnicas de apertura no autorizada es crucial para evitar intrusiones.
Los tipos de bombines varían, desde los tradicionales hasta los de alta seguridad, con características anti-bumping, anti-ganzúa y anti-taladro.
¿Por qué es importante escoger un buen bombín?
Un bombín de calidad es la primera línea de defensa contra los principales métodos de robo. Los ladrones suelen utilizar técnicas como el bumping o el ganzuado para abrir cerraduras sin dejar rastro. Al optar por un bombín de seguridad, se reduce significativamente la vulnerabilidad de la cerradura ante estos métodos.
Tipos de bombines
Existen diferentes tipos de bombines en el mercado, cada uno con sus propias características y niveles de seguridad. Los bombines de perfil europeo, los de serreta y los de doble embrague son solo algunos ejemplos. La elección del tipo de bombín dependerá de las necesidades específicas de seguridad y del presupuesto disponible.
Resbalón
El resbalón es otra parte fundamental de una cerradura. Se trata de la pieza móvil que encaja en el marco de la puerta al cerrarse, proporcionando estabilidad y seguridad. Un resbalón de calidad garantiza un cierre hermético, evitando posibles intentos de apertura forzada.
Paletón o Bulones
Los paletones o bulones son los pernos que se despliegan al girar la llave en el bombín. Estos encajan en el cerradero, asegurando que la puerta quede firmemente cerrada. La cantidad de bulones varía según el tipo de cerradura, siendo más común encontrar tres o cinco en modelos de alta seguridad.
Cerradero
El cerradero es la parte de la cerradura que se instala en el marco de la puerta. Es el receptor de los bulones al cerrar la puerta con llave, proporcionando la resistencia necesaria para mantener la puerta cerrada de forma segura.
Pomo
El pomo es la parte de la cerradura que se utiliza para abrir la puerta desde el interior. Aunque no es la principal barrera de seguridad, es esencial para el uso diario y la comodidad.
Frontal
El frontal es la placa visible de la cerradura que se encuentra en el borde de la puerta. Además de ser estéticamente importante, protege y alberga los mecanismos internos de la cerradura.
Escudo
En los casos en los que queramos poner más seguridad a la puerta, añadiremos también un escudo. Este componente se instala alrededor del bombín para protegerlo contra ataques directos, como el taladro. Un escudo de calidad actúa como una barrera adicional, dificultando aún más el acceso no autorizado.
Entender las partes de una cerradura es crucial para tomar decisiones informadas sobre la seguridad de nuestro hogar. Al elegir componentes de calidad y considerar opciones adicionales como los escudos, podemos mejorar significativamente la protección de nuestras puertas ante posibles amenazas.
¿Necesitas arreglar alguna de las partes que compone la cerradura? Pide un presupuesto a nuestro cerrajero urgente.